Ni tan secretas confesiones

28 julio, 2008

"La super mina" by ANTONIETA CAFFARENA


Hace tiempo que una persona me está haciendo una propuesta; muy tentadora por lo demás, pero que he rechazado por que de aceptarla, me convierto en esa mujer que siempre he criticado: en una mantenida.

Pues bien, tengo que reconocer que no soy una super mina, no la que quisiera ser y que cada día se hace más difícil la fantasía de compatibilizar trabajo, estudio, amor, ser feliz, y no morir en el intento. Por lo demás, los días tienen sólo 24 horas y la semana 7 días y eso no cambia, por muchas obligaciones que uno tenga que cumplir y distracciones con las cuales desalienarse.

Analizando la situación, hay que ver cuáles son los contra de la oferta y en primer lugar está la oferta misma. O sea, pasar a ser esa mujer de cuentos que no es capaz de alcanzar por sí misma sus metas, sino que necesita de un hombre que la ayude o la auspicie mientras las alcanza.

Además, significa deshonrar a la familia y el matriarcado impuesto por mi abuela y esos consejos que me daba de niña: mijita, usted tiene que estudiar para ser alguien y no depender de nadie...ay, weli,si al final uno siempre depende de alguien!!! Ahora, hay que ser realista. Claramente mi vida de mantenida no tendría la rutina de los figurines de serie gringa (gimnasio-mall-tecito con las amigas) lo mas probable es que pasaría a cumplir las funciones de ser la nana-asistente -secretaria-madre-geisha y pareja, por supuesto, de quien sería mi "sostenedor".

Es evidente que mientras preparo la tesis, puedo trabajar, pero va a llegar un momento, en que no podré mantenerme sola y deberé buscar un auspicio: padres o pareja...he ahí el dilema. Dilema que no es tal porque los primeros ya me quitaron su gentil auspicio hace rato. Querian que viera lo que costaban las cosas y lo dificil que es la vida mmmmm como si uno tuviera que trabajar pa darse cuenta de eso. Pues bien. ya concluí algo: necesito ser mantenida por algún tiempo, al menos mientras le trabajo 6 meses gratis al estado. Y luego, mientras preparo mi dichoso examen de grado...total, una vez que me titule podré devolver lo que mi amado insiste en llamar como un préstamo o inversión a largo plazo.

Pues bien, mientras llega el momento en que la propuesta se materialice y yo la acepte seguiré cuestionandome el asunto éste y creyéndome la super mina que creo ser: esa que es capaz de hacer que el día dure 30 horas, que se olvida de los problemas del trabajo mientras el ascensor baja y los de la casa mientras éste sube. A fin de cuentas todos de uno u otro modo necesitamos ser rescatados. No sé si por un principe azul o una doncella ( ninguno de los 2 existen) pero sí por alguien que nos haga sentir importantes, amados, y sobre todo alguien que esté en la misma que uno y que nos demuestre que lo que a uno le preocupa, tambien es su asunto.

Antonieta Caffarena
Editado por Soha at 16:31:00

1 Comments:

bueno es lo que siempre pretendemos, se "independientes"
pero al mas minimo, sentimineto de debilidad corremos a los brazos de alguien, olvidamos nuestros aires de super mujer.
minas po!!!!
pero no tiene nada de malo si los unicos que se dan cuenta que hemos dejado de serlo solo somos nosotras..pffff
volvemos a la realidad y nos seguimos creyendo las mejores
en lo que hacemos ..
en fin,,,,,,,

mujeres jajaj

muy bueno ,, me gusto mucho..
saludos

28 de julio de 2008, 17:33  

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