Ni tan secretas confesiones

05 octubre, 2008

"Para todo hay una primera vez y ¿última?" by ISIDORA LABARCA


Todo seguía bastante normal, a esas alturas ya se había formado una especie de rutina, Messenger a tal hora, facebook a otra, recuerdo que era bastante entretenido, me reía mucho, sabía que no estaba del todo bien, bueno sinceramente ya que uno se las da de Católica, no estaba nada de bien, por que hay un punto en toda esta historia que no les he contado, se trata de un pequeño, pero pequeño detalle… el hombre en cuestión no estaba “soltero sin compromiso” como dice la canción, pero yo me autojustifico diciendo que yo no sabía con claridad que pasaba ahí y bueno, por ultimo: yo lo vi primero! Ja.

Ya se, soy una pecadora, desee a un hombre que estaba “ocupado” (aunque no casado) y mas encima ya sabiéndolo y no teniendo duda alguna continúe, seguí adelante y la cosa alcanzó ribetes inesperados, pero muy interesantes.

Tiempo después de nuestro encuentro me decidí a viajar, ir en busca de la continuación de aquello que estaba recién comenzando. Llegué a Santiago, un poco tarde, estaba lloviendo, pero ni la hora ni la lluvia importó para que a penas diera señales de mi presencia este sujeto me llamara para ponernos de acuerdo de lo que haríamos mas tarde.

Yo salí con la única expectativa de pasarlo bien, tomarme algo, ir a un lugar que tenía ganas de visitar y de que se repitiera algo similar a lo ya ocurrido… inocente yo, no sabía que por la otra parte los planes eran un poco diferentes, un poco mas atrevidos.

Tras unas copas de pisco sour, vino la pregunta del millón: ¿y, te parece si nos tomamos algo mas en mi departamento?, casi muero de la impresión, es verdad, no exagero, por que no todas las mujeres estamos acostumbradas a ese tipo de ofertas y esas ofertas tampoco son de todos los días, al menos para uno, no se ellos… pero como dicen siempre hay una primera vez, (maldito… “primera vez”) y me atreví.

Bien rico el mango sour, era cierto que íbamos a tomar algo mas, pero en realidad solo ahora me acuerdo de la chiva del mango sour, por que bastó con quedarnos un rato solos para dar rienda suelta a todo aquello que ya sabíamos desde hace mucho antes. Y fue mejor de lo que esperaba, no se, la emoción, la adrenalina y todas esas cosas deben influir en la percepción de lo que pasó, pero como sea, fue bueno y para que voy a andar con cosas, el hombre en cuestión es muy guapo y muy coquetón, no se, tiene ese lado oscuro que a las mujeres no se por que nos llama tanto la atención, pero que después nos lamentamos, en fin por ahora eso no importa.

Por primera vez andaba en aquello con alguien que no fuera mi pololo, a esta altura de la vida no creo que a los hombres les importe ni menos que nos crean si uno dijera eso, pero como es mi historia lo digo… por ultimo para entenderme, por que no se me había pasado por la mente algo así, y si ahora lo pienso solo lo pienso con una persona, ¿será que de alguna forma nos condicionamos?, como sea, no creo que se haya dado cuenta, por que todo fue increíble, tal como los besos, en este plano no sentí torpeza alguna, todo lo contrario, enganchamos hasta con esos detalles que vienen con el tiempo, gestos, palabras, formas… todo perfectamente perfecto.

No quise quedarme con el esa noche, me fue a dejar y me acosté pensando que mañana sería otro día y seguramente nos volveríamos a ver, esperaba que todo saliera igual o mejor que ese día.

Isidora Labarca

Editado por Soha at 16:50:00

2 Comments:

bkn tu historia

6 de octubre de 2008, 9:38  

Buena a veces se nos cruzan personajes comprometidos, sy sin quererlo y sin pensarlo ya estamos con ellos/as.
Bonitas sus historias.

12 de agosto de 2009, 22:30  

Publicar un comentario

<< Home